Vanina solía fumar sentada en el balcón
hasta que la lluvia de octubre la aventaba descalza y en saltos chicos al interior de la casa.
Sin ecos solitarios.
Con respuestas y sombra añadida.
El par perdido.
un día no ibas a volver,
porque ya juntos no había nada
más qué hacer...
Presente. Se levanta en busca del murmullo citadino.
Voces revolcándose en torbellino ascendente: tobillos » cabello.
Luces primeras que alumbren la tarde moribunda.
Ideas rancias aligeradas por el viento.
Vanina busca cura al recuerdo. El juramento es. El dolor supura.
house LE. Enrique Norten.
No hay comentarios:
Publicar un comentario