miércoles, 2 de mayo de 2007

Mañana es día de la santa cruz y acepto regalos. Sí, sí, día del albañil y qué es un arquitecto sino maestro albañil (etimológicamente hablando), así que todos abrid carteras y firmad cheques.

Nunca me he subido a un tren, tampoco a un globo aerostático, lo primero algún día lo haré, lo segundo lo evitaré afanosamente. Cada vez que me imagino en una montaña rusa, en un bungee o cayendo desde un paracaídas sé que soy una cobarde, no gracias, hoy no quiero morir, ni mañana, ni pasado, ¿qué tal el estilo a la highlander?.

He olvidado todo lo que me gustaba de la carrera, que ese arquito se llama así y que la humedad se arregla así si la fuente es ésta. Rodeada de ingenieros es difícil recordar... qué buenos pretextos me encuentro.

La mandarina es tremendo cliché, ahora es tan difícil encontrar una buena, con sabor y textura adecuada. Además la época ya terminó, tantas ganas que tengo de una. Mordida y juguito.

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