jueves, 18 de diciembre de 2003

Algo así como un recuento.

Hace unas horas tuve encuentros con alguien en el que un año atrás creía estúpidamente, al final valió 2 cacahuates (ad-hoc a la temporada qué no?). Enfrentarlo me resultó en, cómo puedo decirlo…en un demonio exorcizado, fácil lectura de ideas. Deshaciéndome de:

Fin de año ¿y luego?…calmadita que no hay prisa. Tachones a autopromesas: serías esto y lo otro, tendrías tal cantidad para obtener tanto, irías de aquí a allá. ¡Oh sí, todo antes de el 2004!. Brrrr, no se logró, aspira fuerza y que el frío descocado de tu tierra caliente te apapache para retomar ánimos. Planeando:

Siempre hay tiempo.
Ajá, eso suena a mentira y a pedazo de canción. ¿Bazar con ofertas en venta de horas/vida? Pero, vamos, dicen que soy optimista, habrá que complacer a los que. Nuevas acciones:

Y yo aún no te conozco y ya sé lo que se sabe cuando encuentras un amor. El verdadero.

Sí, sí, él me hace feliz, y puedo decirme: ahora, ¿qué más puedes pedir? Llegó cuando menos lo esperabas y … punto final con sonrisa y felicidad cursi. Presentando a mon traveler:

No vaya a ser, pero no se lo digas a nadie

A nadie por favor.

Definitivo PUNTO FINAL. (por hoy…ups) .

No hay comentarios:

Publicar un comentario