Desde el aeropuerto de Cancún.

3:20 salida de mi vuelo al DF.

Grandioso, grandioso fin

: D

Ayer probé un anís verde oscuro que levantó la noche del viernes, un pub estilo inglés y diez personas se desvelaban mientras seis deseábamos no trabajar el sábado, pero así son las cosas, Fontanarrosa muere y no puedo evitar recordar el libro de caricaturas propiedad de mi hermano, pienso en la tira en donde un boxeador le muerde un pedazo del brazo al otro, o al tenista que sobre la raqueta llevaba un par de martinis mientras su entrenador presumía su buen servicio.

Estoy bien, encuentro el equilibrio y comienzo en verdad a disfrutar, mi vida por el caribe podrá seguir un rato más. Lo único que me pesa es el rencor, tengo mucho dentro de mí, tantas cosas que mueren por salir, decir y reclamar hasta que ya no quede nada que "perturbe mi paz" (chiste localísimo) aunque la situación no tenga nada de gracioso y sí mucho de tristeza añadida, porque hubo planes que se esfumaron para siempre y los cierres de ciclos nunca han sido mi fuerte. Hace poco me sentía especial, realmente especial y todo fue mentira, ésto no es una novela -me dijeron-, lo sé, pero qué hay de la gente que lucha y no sólo se queja, se queja y se queja sin nunca intentar, ¿tanto miedo al intento y al fracaso? Oh dios, claro que sí, no me lavo las manos, dentro de mí me echa a la cara mi parte de culpa (enorme, impensable), pero lo siento, la desilusión aplasta. A quién importa, éso ya pasó, es como el niño que hace berrinche mientras su madre sigue con las compras. No es tan importante, sé lo que valgo y quizá algún día alguien ló apreciará (tocan violines).


Del bar al desahogo y no en la forma precisa, sólo en bytes.

Hoy tendré en las manos el final de una historia y recuerdo las veces que le insistí a alguien que leyera un poco la historia para tener con quién platicar, demasiado esfuerzo. Bah, otra vez la burra al trigo. Es casi fin de semana y queda poco por trabajar, éso es alegría ¿qué no?

Los jefes machistas e hipócritas también tienen su parte, que te digan por un lado que te llevaran a su obra y confían en tí para después decir por atrás que no cumples con el perfil y menos siendo mujer es de lo peor, sólo es desilusión, no significa nada en mi vida, allá los pobres.

P.S. Lo único que me da risa es que ya se me identifica con canciones como "A medio vivir" de Ricky Martin y "Si la ves" de Franco de Vita. Qué oso :p

Por favor, vaya a la esquina, allá por la mesa alta, de patitas finitas y desvencijadas (me pregunto cómo se soporta). Encontrará papel y lápiz del no. 2, puede utilizarlo con la mano izquierda o la derecha, ésa es su elección.Escriba su nombre completo en letra cursiva y bonita. Al final estampe un beso, métala en un sobre y diríjase corriendo a la oficina de correos más cercana. Envíela a su verdadero y único amor.

Así, buen chico.

Si es usted más bien piedra escríba un email con el mismo nombre y un gif animado al final, asegúrese de apachurrar el send.

Hace un año leí el manga de Akuma de Sourou, cursísimo y lleno de amor-desamor, lágrimas, niña buena-chico malo, incesto que-no-lo-es aderezado con ropa y peinados cool.

Lo amé.

El domingo me enteré que existe una telenovela taiwanesa basada en el manga, titulada "Devil beside you" , desafortunadamente no la puedo ver porque en la oficina tenemos bloqueado Youtube, ante lo que sólo puedo decir... !gr!

Y no me importa tener 26... amo a Edogawa Takeru. ¡Oh sí!

Takeru de papel.

Takeru de piel.

Al final del manga dan a entender que estudió Arquitectura, así que, ¿qué más puedo pedir? ¡Ah sí!, que sea real o dejar de ser tan freaky y crecer... o no.

¡Ja!

Anoche creí que sonaba mi celular, me desperté y emocioné.

Pero no.

Duh!

No soy nada sutil, nada, nada.

De profecías y cambios de obra.

Ayer en la noche ví la película del mago que me envicia desde el 2001, cuando el primer libro llegó a mí 2 semanas antes que su versión cinematográfica. Aún recuerdo que esa lectura me alivianó la crisis existencial y estudiantil por la que atravesaba.

Curiosamente cada estreno de libro o película llega exactamente cuando más estresada estoy, así pues, me hace de manera sencilla estar (quizá no ser) feliz.

Las últimas 3 semanas he deambulado por 3 proyectos, y ahora me encuentro en una forma de trabajo de oficina a la que he agarrado el gusto, junto con su bendito aire acondicionado por supuesto. Este repentino amor por el trabajo que antes me disgustaba surgió después de acompañar a alguno de mis compañeros a sus recorridos de obra y supe en carne viva lo que es sudar como si una regadera se hubiese atravesado por el camino.

Así que para todos los que piensen que trabajar en Cancún-Playa del Carmen-Cozumel es la onda, lamento decirlo, pero no, no lo es, al menos cuando las labores obligan a salir al cálido y húmedo ambiente y la vestimenta obligatoria son jeans, playera, botas y casco.

El mar es espectacular, éso ni dudarlo, pero aquellos quienes viven en costas saben, al igual que yo en este momento, que al pasar los meses uno va perdiendo la emoción. De todos modos estoy quejándome menos (sí, ésto en comparación a lo quejumbrosa que soy es nada) porque ahora estoy rodeada de gente de mi edad, no como el año que pasé enclaustrada en una isla. A pesar de que tenemos personalidades totalmente distintas y ocasionalmente nos fastidiemos los unos a los otros hemos formado una especie de comuna que algunos han reconocido envidiar.

Llegar cansados a un "campamento" (dícese de la casa, departamento o casa en que la empresa nos hospede) comprar algo para una cena rápida en el oxxo o pedir a domicilio después de una jornada de 12 horas (si bien nos va) y platicar (o ir al cine) hasta las 2 de la mañana para despertarnos a las 6 no tiene precio, es cierto que las ojeras son un plus no muy positivo (sobre todo cuando la carrera que se estudió se llevó toda la capacidad de mantenerse despierto toda la noche) pero no sé, son algunos eventos positivos en el proceso -oh!, doloroso- de crecer. Es éso o ver la película y creer que la fuerza está en tener algo por lo que pelear me afectó. Éso o el sueño que me cargo. O solamente que sí, soy extremedamente cursi y hoy estoy feliz.

Solía tejer bufandas al fantasma de nadie, así le llamé robándome la canción que no tenía que ver, hasta que de pronto dejé las galletas de mantequillas y las cucharadas de nutella por temor a engordar más. La falsedad fue otro punto que no será tocado, después de todo quién soy yo. Todo indica que nadie cuando lo correcto sería totalmente nada.

Cada vez que el despertador suena y logro coordinar ideas pienso en un parque con árboles de frío, pero no es cierto, lo acabo de inventar, la clase trabajadora no tiene tiempo para sueños en vigilia.

Quiéranme. Es la orden.

En el día de compras no dudes en cargar con tu bolsa de mercado, con rayas rojas, azules y amarillas, no es que sea la mejor combinación pero aguanta los kilos de papas y naranjas necesarios para aguantar la semana de calor. Procura ir caminando, que la fila de las combis de regreso a su central se alarga al infinito. Toma vitaminas y consume proteínas, el músculo fuerte evitará agotamientos y calambres. En diciembre añade cacahuates, mandarinas y si amaneces de humor caña de azúcar para chupar hasta empalagarse los codos. El día de compras es el fin de semana inmediato a tu día de paga. El mercado y el súper te esperarán.

***


Soy fan de Ratatouille, duh!

Solía manejar en la madrugada, con la neblina lamiendo los neumáticos y el rocío desprendiéndose de la cajuela a toda velocidad. Llegó el día de las vacaciones y las llaves gritaban desde mi bolsillo para girar y llevarme lejos de todo. Era un bonito coche dorado. Era una bonita mañana. Era una lluvia que se volvió torrencial. Ese mismo día las vacaciones llegaron a su fin.

Entre cotas

Mide aquí y mide allá, cuantifica, cuantifica. Éso ni es. Cómo de que no, es sólo de encontrar el ritmo.

Debí estudiar algo que no exigiera concentración y paciencia, ¿existirá? Ser monje escribiente no sería lo mío, siento que las catedrales se me hubiesen caído, me habría dedicado a pastorear o algo así.

Ya tengo el cabello rojo o lo que se le parece, dicen como 3 que se me ve bien, a mí me gusta.

No encuentro la emoción y/o pasión a saber cuántos metros cuadrados de plafón, pasta y mármol se necesita para un hotel de españoles que se apoderan de nuestro caribe (sob, sob). ¿Cómo es que te vas Salvador de la compañía?. Pero la caja de ahorro y la semanita exacta en el cajero detienen, decisiones, decisiones... ch-ch-ch-changes!

Quiero zucaritas con leche, quizá con cachitos de plátano, es tan dulce que me quita un poco lo amargoso. No sé cómo ocultar mi cara de "bah, patrañas" cada vez que alguien me cuenta sobre el tercer ojo, los viajes astrales y de rezar para que ahora sí nos vaya bien, pero lo intento, a veces me sale. Me gusta no creer, de verdad, pero me ven con cara de "no sabes platicar de todo ni ser cosmopolita".

Me preguntaron sobre los blogs y yo emocionadísima conté cada detalle, el oyente me regresó mi cara de "bah, patrañas" y mencionó que es gente sin nada qué hacer... ouch, qué hay de malo en éso, si yo no tuviera qué hacer (y contara con una súpercuenta en el banco) no me molestaría gastar cierta parte de tiempo en la red. Desgraciadamente no tengo demasiado tiempo ni dinero y heme aquí.

Vicios ocultos, garantía un año.

Sky above us

Niño Pescando
Originally uploaded by Manuel Pozo

Cuando se recibe una noticia así dicen que lo más común es el pensamiento narcisista de que no será el niño perfecto, éso es lo de menos, en esos casos el egoísmo está de más. ¿qué hay de todo lo que tendrá que privarse? La música que tantas veces quita en sinsentido de la vida, cómo no compartir todo lo que alguna vez a mí me hizo vibrar, enmudecer, gritar o bailar, o los murmullos que guardan secretos de amigos entre clases, las gotas de lluvia cuando te encierras en el cuarto para desafiar a tus papás, los pasos de alguien que se acerca a tí, los granitos de las palomitas al explotar... y la lista apenas comienza, pensarla duele. La ciencia está avanzada y saldrá adelante porque acá nada se quedará en frases, pero es algo que necesita salir

Casi no lo conozco y aún así lo quiero, apenas nació tuve que salir de casa para buscar trabajo, lejos siempre del hogar. Él poco sabe de mí y me siento tonta por regalarle un Elmo que se reía cuando no tenía sentido para él, simplemente no lo podía escuchar.

Es ahora cuando prometo que para él y su hermano el mundo tendrá sentido completo, que las imágenes, las emociones, las letras siguen ahí y serán doblemente intensas porque las notarán, de éso nos encargaremos todos. Hay gente que puede tener acceso completo a las sensaciones y las pasa por alto, ustedes no.

Él, el niño más pequeño de la familia tiene lo más importante, mucho amor y fuerza a su alrededor.

Actual

Entre villanos te veas. Bien dicen que escribir de esta manera no tiene sentido alguno ¿Quién podrá enseñarme entonces? Que el tiempo pasa y la vida es corta y no te puedo olvidar.

Al arte abstracto yo no lo capto, ayer me dí cuenta que no sé sacar ángulos con el cateto opuesto y la hipotenusa, que la trigonometría ha pasado de largo como el agua por mi casa y cate de mi corazón o algo así.

Por la película que volví a ver olí mi piel y me dije: Dios mío que no huelo a nada, me pregunto a qué oleré quitandito el bloqueador solar, la crema para los ojos, el talco y el shampoo, I just don't know what to do with my skin.

Los supermercados me hacen feliz, tengo dos favoritos pero son tan poco políticamente correctos que me autocensuraré, sólo diré que uno vende cosas en empaques grandotes y otro explota a sus empleados, a mí también me explotan pero vivo en una casa bonita, sí, ya me cambiaron y abandoné mi isla, aunque sigue envolviéndome el calor.

Hay tardes o noches en que comienzo a dormirme y de repente cuesta tragar saliva y hasta respirar, está bien que estoy acostumbrada a la soledad (aunque suene dramático sí, sí), pero dios ésto es ridículo (así con minúsculas para no herir susceptibilidades).

Me compararon con un libro en donde la protagonista es una prostituta, no entendí la relación, no me gusta Coehlo pero es rico y hoy soy total y descaradamente superficial, de todos modos no tengo el dinero suficiente para sentirme mal, estar en la clase media no es nada halagador, y con éso de que es clase media baja y clase media alta (yo soy de familia de clase media alta, dijo una chava en televisión ja) está tan alejada de Slim que ya no sé qué decir.

La empresa para la que trabajo cumplió 60 años pero no me tocó nada de la celebración, de hecho mi casco no trae logo porque se acabaron las calcomanías, así que por ahora trabajo para Trupper (mal chiste).

Tengo 3 heridas no mortales en mi brazo y mano derecha, un rasguño por (creo) un alambrón, una raspada en la muñeca por resbalarme con pedazos de cimbra (cosa que no debería ser, se supone que nuestras obras deben estar limpias y ordenadas pero shhh) y un corte en el dedo con el flexómetro (éso fue babosada mía).

Me gusta mi nuevo celular, es muy "brillante" lo chafísima son los tonos disponibles para mensajes y lo bajito que se oye bu, pero lo lindo es lo lindo y ya me había cansado de mi celular requetefuncional pero cuadradote, además lo perdí así que total.

La situación de salud en mi familia que me preocupaba demasiado salió bien, estando tan lejos de todo al fin me quité un gran peso de encima, creo que el más importante y vaya, creo que lo demás saldrá, total, si no se arregla al menos acá (ni qué hacer) sigo (cliché presente, de pie).

¡Hola!