martes, 13 de septiembre de 2005

Algún día

ººº

Corriendo hasta que el reflejo de los latidos invade el cuerpo, con la piel caliente y las piernas entumecidas, distantes. Bajando a trote acompasado al ver el primer automóvil desde veinte minutos atrás cuando inició la carrera al filo de una carretera gris que conduce a una playa con nombre antiguo.

ººº

En tarde plena, la huida continuó hasta que los grillos comenzaron a cantar.

ººº

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