jueves, 9 de septiembre de 2004

De la fascinación de tomar un baño mientras la noche comienza a caer.

No importa cuántes veces se haya hablado de la muerte del sol y los efectos que causa en los niveles de melancolía, pero, acabo de tomar una ducha mientras dejo correr canciones pasadas, y me siguen asombrando los efectos disparadores del recuerdo.

Porque Mecano y Era me recuerdan mis primeros días en la universidad, cuando tomaba el autobús de una ciudad desconocida para dirigirme a las clases de 7, de una carrera que aún sigo sin comprender, relación odio-resignación-afecto.

Porque Dido me dice que en Diciembre del 2003 conocí a la mejor persona del mundo, y aunque la letra de despedida del amor sin renunciar no cabe en mi historia, la múscia es la que causa estragos y me lleva al momento de espera, cuando el teléfono me hacía saber que había llegado a la terminal de autobus.

Porque un simple olor de jabón me hace sentir de 6 años y me prepara el segundo año de primaria, cuando las tablas de multiplicar eran el hit.

Porque el último rayo de luz sobre los azulejos y la caída de agua sobre el rostro no me dejan creer que la vida pasa tan rápido y yo sigo procesando momentos que mañana serán solo recuerdos, que el hoy será ayer, y estas palabras se repetirán en otro lugar.

Image hosted by Photobucket.com Image hosted by Photobucket.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario